*** Las voces de Dios y los posicionamientos frente a los mundos constituidos:
Pregunta 2: ¿Quién es el profeta bíblico?
Respuesta 1: de William Calderon Chaves - miércoles, 1 de septiembre de 2010, 19:02
“Profeta es una voz griega, y designa a quien habla por otro, o sea en lugar de otro; equivale por ende, en cierto sentido, a la voz "intérprete" o "vocero". En el hebreo se designa al profeta con dos nombres muy significativos: El primero es "nabí" que significa "extático", "inspirado", a saber por Dios. El otro nombre es "roéh" o "choséh" que quiere decir "el vidente", el que ve lo que Dios le muestra en forma de visiones, ensueños, etc., ambos nombres expresan la idea de que el profeta es instrumento de Dios, hombre de Dios que no ha de anunciar su propia palabra sino la que el Espíritu de Dios le sopla e inspira.
El concepto de profeta se desprende de esos nombres. El es vidente u hombre inspirado por Dios. De lo cual no se sigue que el predecir las cosas futuras haya sido la única tarea del profeta; ni siquiera la principal. Había profetas que no dejaban vaticinios sobre el porvenir, sino que se ocupaban exclusivamente del tiempo en que les tocaba vivir. Pero todos -y en esto estriba su valor- eran voceros del Altísimo, portadores de un mensaje del Señor, predicadores de penitencia, anunciadores de los secretos de Yahvé”.
*** Las voces de Dios y los posicionamientos frente a los mundos constituidos:
Pregunta 3: ¿Es el profeta un ser humano que actúa sólo (digamos, al estilo Jonás), que actúa a partir de una relación individual con Dios? ¿Es el profeta aquel que actúa como un Nostradamus escribiendo en la soledad de una cabaña alejada? ¿O contiene lo profético un núcleo siempre social que procura realizar emprendimiento comunes junto a otros? ¿Qué tiene que ver esto con la noción de Iglesia en la propuesta de V. Codina?
Respuesta 2: de William Calderon Chaves - miércoles, 1 de septiembre de 2010, 19:27
“En cuanto al modo en que se producían las profecías, hay que notar que la luz profética no residía en el profeta en forma permanente (II Pedro 1, 20 s.), sino a manera de cierta pasión o impresión pasajera (Santo Tomás). Consistía, en general, en una iluminación interna o en visiones, a veces ocasionadas por algún hecho presentado a los sentidos (por ejemplo, en Dan. 5, 25 por palabras escritas en la pared); en la mayoría de los casos, sin embargo, solamente puestas ante la vista espiritual del profeta, por ejemplo, una olla colocada al fuego (Ez. 24, 1 ss.), los huesos secos que se cubren de piel (Ez. 37, 1 ss.); el gancho que sirve para recoger fruta (Am. 8, 1), la vara de almendro (Jer. 1, 11), los dos canastos de higos (Jer. 24, 1 ss.), etc., símbolo todos éstos que manifestaban la voluntad de Dios.
Pero no siempre ilustraba Dios al profeta por medio de actos o símbolos, sino que a menudo le iluminaba directamente por la luz sobrenatural de tal manera que podía conocer por su inteligencia lo que Dios quería decirle (por ejemplo, Is. 7, 14).
A veces el mismo profeta encarnaba una profecía. Así, por ejemplo, Oseas debió por orden de Dios casarse con una mala mujer que representaba a Israel, simbolizando de este modo la infidelidad que el pueblo mostraba para con Dios. Y sus tres hijos llevan nombres que asimismo encierran una profecía: "Jezrael", "No más misericordia", "No mi pueblo" (Os. 1).
El profeta auténtico subraya el sentido de la profecía mediante su manera de vivir, llevando una vida austera, un vestido áspero, un saco de pelo con cinturón de cuero (IV Rey. 1, 8; 4, 38 ss.; Is. 20, 2; Zac. 13, 4; Mt. 3, 4), viviendo solo y aun célibe, como Elías, Eliseo y Jeremías”.
*** Las voces de Dios y los posicionamientos frente a los mundos constituidos:
Pregunta 3: ¿Es el profeta un ser humano que actúa sólo (digamos, al estilo Jonás), que actúa a partir de una relación individual con Dios? ¿Es el profeta aquel que actúa como un Nostradamus escribiendo en la soledad de una cabaña alejada? ¿O contiene lo profético un núcleo siempre social que procura realizar emprendimiento comunes junto a otros? ¿Qué tiene que ver esto con la noción de Iglesia en la propuesta de V. Codina?
Respuesta 3: de William Calderon Chaves - miércoles, 1 de septiembre de 2010, 20:18
“El profeta auténtico es universal, predica a todos (...); el falso, en cambio, no se atreve a decir la verdad a los poderosos, es muy nacionalista, por lo cual no profetiza contra su propio pueblo ni lo exhorta al arrepentimiento.
Por eso los verdaderos profetas tenían adversarios que los perseguían y martirizaban; los falsos, al contrario, se veían rodeados de amigos, protegidos por los reyes y obsequiados con enjundiosos regalos”.
*** Las voces de Dios y los posicionamientos frente a los mundos constituidos:
Pregunta 1: ¿Qué impacto ha tenido la transmisión e interpretación de las "voces de Dios" en las movilizaciones sociales? ¿Cómo, a partir de un discernimiento de "las palabras de Dios", esos emprendimientos colectivos [denominados "iglesias"] se posicionaron ante los mundos constituidos?
Respuesta 4: de William Calderon Chaves - miércoles, 1 de septiembre de 2010, 20:36
“La función principal de los profetas era enseñarle al pueblo a vivir y a creer en Dios correctamente. Viendo el abandono de la ley de Dios, los profetas acusaban severamente a todos los pecadores, tanto de la clase alta como de la baja, a gente del pueblo y a príncipes, a jueces y a sacerdotes, a reyes y a esclavos. Su inspirada palabra tenía una gran fuerza para despertar la penitencia y el deseo de servir a Dios. Los profetas eran la conciencia del pueblo y la guía para los que anhelaban una dirección espiritual. Sólo gracias a los profetas, la verdadera fe se mantuvo entre los hebreos hasta el tiempo del nacimiento de Cristo (...). Pero los profetas no sólo acusaban. Cuando sucedían catástrofes y desastres sociales, ellos se apresuraban a consolar a los que se arrepentían con la esperanza en la misericordia Divina y prometían a la gente la ayuda superior y un futuro mejor” (Mileant, 2000).
*** Las voces de Dios y los posicionamientos frente a los mundos constituidos:
Pregunta 2: ¿Quién es el profeta bíblico?
Respuesta 5: de William Calderon Chaves - miércoles, 1 de septiembre de 2010, 21:09
“El sacerdocio se trasmitía por herencia; en cambio los profetas eran llamados por Dios individualmente. Ellos provenían de distintas clases sociales: eran aldeanos y pastores, como Oseas y Amós o gente de la alta sociedad como Isaías, Sofonías y Daniel. También había profetas de origen, sacerdotal como Ezequiel y Habacuc. El Señor elegía a los profetas no por su origen sino por sus cualidades espirituales” (Mileant, 2000).