Prácticas religiosas cristianas hoy

Refiere a aquella concepción que busca establecer una relación entre el mundo de lo sagrado y lo no-sagrado o secular.

 

INFORME DE INVESTIGACIÓN

LO RELIGIOSO LOCAL A LAS SOMBRAS DE LO GLOBAL

 

CAPITULO 2. Matriz axiológico-religiosa palmareña

 

De los autores: Dr. Dagoberto Núñez Picado

Bach. Andrey Pineda Sancho

 

William M.J. Calderón Chaves

03 de noviembre de 2012

 

A continuación se transcribe parte del aporte que ofrecen los autores Núñez y Pineda (2011) respecto a la matriz axiológico-religiosa palmareña, a la vez que se reflejan importantes elementos y conceptos que ayudan a elaborar una investigación de prácticas religiosas o eclesiales, entre otros campos de análisis.

 

La construcción de una “casa para Dios” resulta una necesidad de carácter simbólico-religioso cuya satisfacción puede resultar imperiosa, en la dinámica de vida de una comunidad que empieza a serlo. La casa de oración reúne las familias, a los vecinos y amigos. La religión actúa como factor de cohesión e interpretación de la vida cotidiana

 

Iglesia y un lugar de pertenencia en los comienzos. El arribo de los pobladores va erguiendo su identidad al cobijo de cierta institucionalidad marcada por el catolicismo (única presencia institucional significativa a la fecha, en el medio). Con razón histórica se trata la institución cultural con más influencia en este medio.

 

Lo religioso: fuente de conflicto entre Barrio Mercedes y su cantón ramonense. La visita a un templo religioso entraña una actividad de mucho cuidado para la familia campesina: llegar encharcado puede significar un irrespeto hacia los vecinos con los cuales se comparte la experiencia religiosa.

 

La primera relación “de tu a tu” con el aparato eclesiástico. Nombramiento de un representante del pueblo ante la Curia Eclesiástica para que se les nombre un párroco que les llegue a evangelizar. Además, coincidencia de los límites eclesiásticos con los administrativos que se razona señalando que "la autoridad eclesiástica" sí consideró sus necesidades de comunicación por cercanía con el recién fundado cantón de Palmares (1888).

 

Procesos colectivos durante la construcción del templo. La dinámica de participación en el proceso de construcción del templo acontece cuando se convoca a algo así como una especie de referéndum.

 

La primera decisión: de ¿barro o de piedra? Después del referendum, la decisión en torno al material de que debía ser construido el templo nuevo trajo la necesidad de dos consultas: una técnica y la otra, de disciplina eclesiástica.

 

Aprendiendo todo sobre mega-construcción. Las familias locales experimentan cambios en su vida cotidiana (aprender a convertir las rocas ásperas en piezas que se acarrean y colocan en el edificio). En todo momento la mano de obra local fue constante, masiva y no pocas veces, gratuita.

 

Primera junta coordinadora de los trabajos del templo. Permanentemente el sacerdote indaga con la Junta Directiva y Económica de los Trabajos del Templo sobre todo el inventario de materiales y el estado de cuenta general.

 

El destierro del cura Gómez y el movimiento comunal para su retorno. De su relación territorial con San Ramón los vecinos del Barrio de Las Mercedes (todos inmigrantes), habían aprendido la importancia de tener un templo. El padre Gómez es desterrado de Palmares y se impone al Pbro. Andrés Vilá y Abó en su lugar. Las familias palmareñas realizan un movimiento de resistencia bajo la modalidad de una orquestada negativa a cooperar con él, en lo mínimo. La principal motivación de la población tiene relación directa con la construcción del templo nuevo. Gómez ha recibido de Echeverri las directrices para el desarrollo del proyecto y la comunidad ve con temor aquel cambio de sacerdote porque amenaza el gran proyecto común (identificación del pueblo con el cura párroco para bien de la comunidad y garantía de la realización del proyecto).

 

La búsqueda de fondos económicos para el templo y los excedentes del café. Dos tipos de documentos se crean y representan el compromiso de los vecinos para aportar fondos "todo el tiempo que dure la ejecución" del trabajo de construcción. Uno de los documentos es un pagaré dirigido especialmente a los cafetaleros. El segundo documento es un "vale" como opción de colaboración para aquellas personas cuyo ingreso no proviene de la producción cafetalera. El vale es pagadero en anualidades.

 

Poner techo a la Casa de Dios es como hacer el cielo. La alegría comunal a raíz del trabajo de desentejado del templo antiguo. El montaje de la última armadura del templo fue, simbólicamente, realizado por mujeres, y al ya importante peso del objeto se añadieron banderas nacionales y de la iglesia. La comunidad palmareña demostró una enorme capacidad organizativa (sostenida por 23 años) de forma permanente.

 

Características fundacionales de la axiología religiosa Palmareña. La construcción del segundo templo de Palmares (el primero se había erigido en 1860) supuso un esfuerzo social extraordinario para el momento histórico (1892-1914). La extracción social del capital que posibilitó el templo está relacionada con el café y con un volumen descomunal de trabajo voluntario colectivo. Se muestra la relación intrínseca entre cultura religiosa y sistema de vida global de la comunidad palmareña en los momentos del auge cafetalero. Este vínculo esencial entre cultura religiosa y sistema de vida regido por el cultivo del café, se experimenta como proceso de autocomprensión colectiva. El proceso de construcción del templo es un dispositivo disparado por los procesos culturales de cohesión y comprensión social.

 

Los rasgos específicos de la axiología religiosa palmareña tal y como se deriva de lo planteado, son:

 

Rol económico del café como medida aceptable de valor general. Producto que fija el valor de la forma de pago de la donación. Sea que se puede dar el equivalente del valor de dos cajuelas, o bien, proporcional a su bolsillo. Si el donante es muy pobre puede ayudar a acomodar el café en determinado lugar, mientras se negocia el mismo, o bien ayudar echando en sacos el café recogido y luego cargándolo en la carreta.

 

Necesidad de una presencia e influencia del clero para la vida comunitaria. Entre las dos décadas de diciembre de 1866 a junio de 1886, la Filial de San Anselmo conoció una docena de curas párrocos. Los sacerdotes Esteban Chaverri Pupo (cura párroco de 1886-1897) y Manuel Bernardo Gómez Salazar (párroco de 1897-1920) serán los que se van sucediendo más establemente en la Filial de San Anselmo, "a estos sacerdotes nada les es ajeno y, como en los tiempos del Padre Soto (primer sacerdote de la Filial), visitan a las familias para crear hábitos cotidianos e impartir normas de higiene, inciden en la familia, en la educación, discuten y colaboran con el poder municipal, organizan distintos grupos en comunidad pero, sobre todo, aglutinan el esfuerzo en la construcción de la iglesia". Los lazos entre representantes de la parroquia y la población están condicionados por los continuos cambios de cura párroco (no se sabe si sirvió para evitar un "poder despótico" por parte del clero o si frustró lazos afectivos y proyectos mayores).

 

La construcción de templos como forma de identidad local dentro del paradigma agrario. En este periodo de "convivencia pacífica" (1892-1940) entre la Iglesia y el Estado costarricense se construyen numerosos templos en el país y los sacerdotes permanecen más tiempo en las parroquias (lo que permite al cura un mayor control social y una inserción más consistente en su jurisdicción). Los conflictos entre el párroco y la colectividad o la rebeldía de algunos sacerdotes frente al poder jerárquico, son las dos causas que provocan mayores cambios en las comunidades. Una de las necesidades prioritarias para lograr un sentido de pertenencia local reside en tener claridad en los límites territoriales. Lo geográfico es el lugar (territorio) donde surgen esos conflictos necesarios e inherentes al desarrollo, de esta fase, de la historia de las comunidades en tanto circunvecinas.

 

La serie de controversias entre los vecinos de la región (influye la noción de centro y periferia como parte del juego de poder regional), plantea necesidad de identificación, de limitar el núcleo de pertenencia, de poseer lo propio comunitario y compartido (un nombre, una iglesia, unos límites, un cementerio). El rol de la iglesia como eje integrador y como regulador de buena parte de la vida cotidiana figura unido a una necesidad de legitimación, de institucionalización, de un esfuerzo comunal por darse un templo y aprovechar sus espacios, como legitimadores sociales.

 

Axiología religiosa de una comunidad reproductora del binomio autoridad-obediencia. Se sirven de algunos conceptos de Marià Corbí (1996) que permiten sistematizar lo expuesto hasta ahora.

 

Este aspecto de la vida cotidiana tiene alcances en la vida religiosa: de hecho, siguiendo la teoría de Corbí (1996, 19-24), el binomio autoridad-obediencia figura como articulador de la axiología religiosa agraria en general. En sus términos en la sociedad agraria la sumisión es la clave de sobrevivencia. En la sociedad agraria la interpretación de la realidad está sujeta a la principales actividades realizadas y al tipo de organización social autoritario requerido para ellas. Esta afirmación sigue la tesis de que la sociedad agrícola genera un patrón de interpretación de la realidad que figura ligado a la acción de enterrar el grano –hacerlo descender a la tumba-, para Corbí esta metáfora es esencial en la concepción cristiana de la vida. Complementariamente, la acción de cosechar genera un patrón interpretativo de la realidad: "la muerte se transforma en vida" (1996,24). La siguiente formalización resume la mitología fundamental que opera en la axiología agraria proveniente de la versión cristiana:

 

M A N D A T O ======== sumisión

 

Muerte-Vida

 

Corbí hace la observación de la tendencia dentro de este esquema a reproducir "el eterno retorno" (1996, 25) como un recurso explicativo de la realidad rural aplicable a la cultura, a partir de la experiencia cíclica ligada a la producción y dependiente de los climas según estaciones del año y su influencia en los procesos de siembra y de cosecha. Contrariamente, aclara el autor en otro lugar (1996, 28) el modelo ganadero de interpretar la realidad se rige por una lectura lineal y polarizada.

 

Por otra parte, además, la dependencia de la lluvia crea otra tendencia, hacia características jerárquicas en su organización social que son las que hacen funcionar la unidad familiar de producción. Aunque las sociedades agrícolas de riego tienden a un nivel de jerarquización y de autoritarismo mayor en su estructura social con relación a las sociedades que dependen de la lluvia, éstas dentro de sus mecanismos posibilitadores del cultivo no se diferencian de aquéllas en cuanto generan una ocupación laboral dominante (…)

 

Palmares en tanto sociedad de lluvia, se ve regida por el binomio autoridad-obediencia. Resulta cardinal para comprender al sujeto palmareño (como cultura agraria en términos generales) reconocer que su sistema de vida opera regulado bajo el esquema "mandato-obediencia" como articulador de su mentalidad. La sumisión del poblador campesino es la actitud fundamental que hace funcionar el sistema de vida que está a la base de la mentalidad agraria. El campesino no precisa de fuertes organizaciones sociales si puede realizar a nivel familiar su labor (1996,20).

 

(…) El binomio autoridad-obediencia comporta un esquema mental que genera una interpretación de la realidad como totalidad cuya programación sostiene que "todo lo que existe y tiene vida procede de la sumisión, procede de la palabra, del mandato, de la autoridad" (Corbí: 1996, 22).

 

(…) El sentido común predominante en el mundo del trabajo agrario está marcado por la experiencia de cultivar y, al hacerlo, por la realidad de constatar cómo " de la muerte surge la vida" (esquema interpretativo básico, heredado del modelo cazador con una modificación "mínima" pero "suficiente").

 

Además, por lo que tiene de agraria y de tradición cristiana la comunidad palmareña participa de lo que corresponde a la manifestación más desarrollada (cualitativamente) de la configuración axiológica católico-cristiana. En eso consiste su carácter axiológico-religioso. Resulta ilustrativo, de lo señalado, el gráfico que elabora Corbí para formalizar el carácter del patrón de representación mental del cristianismo (1996, 41) (…) Para Corbí la tradición cristiana occidental produce dos coordinaciones fundamentales: el cristianismo consigue coordinar, por una parte, la versión dualista citadina y por otra, la agraria-autoritaria (…) El modelo agrario autoritario es la otra coordinación del cristianismo que Corbí explica: según ésta Dios envía a su hijo a la tierra para que, por obediencia, muera y con ello fecunde a la muerte volviéndola vida. Dios resucita al que murió por obediencia y lo sienta a su diestra (1996, 39-40).

 

Conclusiones:

 

La primera conclusión es que no es pensable la primera fase de asentamiento de un grupo de familias migrantes sin un máximo de inflexible organización y una gran dosis de valentía.

 

Estas familias pioneras fueron obedientes a las iniciativas que impulsaron los sacerdotes católicos que animaron a la comunidad a participar en la construcción del templo católico.

 

Esa obediencia asumió la forma de una conducta cristiana; representó una respuesta de obediencia a Dios para quien la comunidad “debía” construir una casa: ya habían construido sus viviendas, ¿cómo no podrían hacer una nueva casa para Dios?

 

El arrojo de su parte, y mucho de los férreos deseos de superación no se verían coronados sin grandes sacrificios para las mujeres, niñas y niños que (bajo el modelo patriarcal propio de la época) sumaron sus brazos a la obra eclesiástica con la decisión de los jefes de familia.

 

La visión de mundo agraria que soporta (…) la gesta de la construcción del templo, desprende rasgos de la organización comunal de la que fueron parte: traducidos a la cosmovisión de la época se ve que la construcción del templo se hizo posible en un trecho de más de dos décadas, la comunidad se mantuvo - poderosamente cohesionada- y al unísono asumió una interpretación de consenso, sobre la importancia de la construcción del templo.

 

Se destaca del modelo axiológico un primer rasgo fuertemente jerarquizante. Todo en la representación religiosa de la vida cotidiana dicta a “mirar hacia arriba” para asegurar un futuro promisorio; la forma como el sacerdote que está al frente asegura la convivencia es “dialogando” mediante fórmulas en la que desistir de la construcción no es una opción (por ejemplo, la pregunta no es si se deber priorizar o no la construcción del templo, sino si se construye ¿de piedra o de barro?).

 

El que sea un clérigo quien siempre está al mando supone un eje o centro regulador necesario y suficiente para la sobrevivencia del proyecto: la comunidad aprende la importancia de que haya un líder que –diferente de ellos- marque el ritmo del proyecto y se le concede toda la autoridad para hacerlo. Los sacerdotes que lideran poseen los dotes de liderazgo –incluso la comunidad reconoce ese liderazgo más en unos que en otros- pero aquí también la interiorización de un modelo de representación social religiosa, dentro del paradigma agrario, en el cual el arquetipo axiológico de unidad primordial lo cataliza un sujeto a quien se le otorga la autoridad para que regule la unidad: es, definitivamente, un punto central o eje entorno del cual se defienden los intereses particulares.

 

El paradigma agrario característico del pasado palmareño desprende una matriz histórica-cultural que exhibe un núcleo de representación social de carácter religioso cuyos rasgos principales, son los siguientes. Se trata de una representación de tipo:

 

Autoritaria: supone un centro regulador necesario y suficiente para la sobrevivencia de la vida cotidiana en el contexto socio-cultural propio.

 

Centralizada: la representación social religiosa, dentro del paradigma agrario-tradicional, presenta en su núcleo un principio de unidad primordial regulado desde un centro que concentra las decisiones y el poder fundamental: el grupo familiar o laboral se regula desde una delegación de poder defendido como funcional para todos.

 

Patriarcal: el pater en el esquema familiar lo mismo que el sacerdote en el plano social es el sujeto social legitimado con la responsabilidad de liderar: todo el sistema social -en el plano de la vida cotidiana y más allá- masculiniza sus cuadros de mando como normatividad social; solo el patriarca –según denota la tradición judeo-cristiana- tiene por derecho un papel hegemónico efectivo.

 

Jerárquica: el modelo epistemológico, el posicionamiento respecto de lo que se considera real, es de orden jerarquizante. La vida cotidiana –familiar y laboral- corrobora el carácter jerarquizado y se expresa en la normativa existencial, consuetudinaria.

 

Dentro de la matriz axiológico-religiosa, la organización eclesiástica católica exhibe – vigorosamente - esta forma organizativa, como institución monárquicamente verticalizadora en su funcionamiento y estructura.

 

Sacrificial: resulta concordante con los rasgos anteriores la constatación de que la cultura dominante en el contexto del pasado local palmareño representaba un escenario sacrificial para sus pobladores.

 

Referencia bibliográfica

 

Núñez Picado, Dagoberto & Andrey Pineda Sancho (2011). CAPITULO 2. Matriz axiológico-religiosa palmareña. En: Informe de investigación. Lo religioso local a las sombras de lo global (pp. 44-77). Universidad Estatal a Distancia (UNED). Costa Rica.

Ir a Categorías
Ir a Categorías

 

Ir a Práct.Relig.Crist.Hoy         Subir          Ir a siguiente tema

 

<= Click aquí  

 

*  VI Ciclo *

2012

 

NOVEDADES DEL SITIO

   

Del

01-Octubre-2012

al

03-Noviembre-2012

........... Enlaces Internos ...........
........... Enlaces Internos ...........
El Tiempo San José
......... ¡Jesús resucitó! .........
......... ¡Jesús resucitó! .........

AVISO LEGAL PARA VISITANTES DEL SITIO:

Esta página web cuenta temporalmente con el servicio prestado por Google, Inc., adicional a jimdo, del seguimiento estadístico mediante

Google Analytics.

****************

Website counter